Este es un canto fúnebre para niños, cantado alrededor de 1990 por el awá Francisco García († 1994), de Coroma, Talamanca. Cuando morían niños pequeños, los mayores les hacían cantos como este en la celebración de sus velorios. El canto se encuentra en la historia Mìkã Sibö̀ tsikìne (Cuando Sibö̀ nació), línea 80, en I ttè - Historias bribris. En este canto, el zorro (bikli') canta y Sibö̀ lo acompaña con la maraca.
En la misma historia (línea 108), don Francisco incorpora este otro canto fúnebre, en el cual se cuenta que los diablos Sòrbulu agarraron al pájaro carpintero (tsanè) y lo amarraron por creerlo de mal agüero: "Lo tenían amarrado, pero al rato vieron al carpintero allá arriba, agarrado del palo de pejibaye." Eso de seguro era mal agüero.
En la historia Ì kierö be tö i ttéwã (¿A qué le llama usted "el canto"?), línea 107, en I ttè - Historias bribris, don Francisco hace este canto, que se refiere a cuando Sibö̀ va a buscar a su hermana Namàitami (la danta) para que vaya a repartir el cacao en la fiesta de iluminación del mundo.