Canto de awá
Amaneció
(Cuando Sibö̀ iluminó el mundo)
por Awá Francisco García, de Bajo Coén, Talamanca.
Transcrito y traducido por Alí García Segura.
Kã́ñĩnã (Amaneció)
Kë́këpa õ̀r: Ööö...
À sölönũla wë
kṍñĩnẽ wë, kṍñĩnẽ wë
aaajöö...
À sölönũla wë
tötè dòbichö
kã́ñĩnã wë, kṍñĩnã wë
aaajöö...
Ák lè biyö lè
kẽ́ñĩnã
ìlè lölea kẽ́ñĩnã
Kërkalacha wéskala
kẽ́ñĩnã
À sölönũla wë
ditsö̀ té rawi cha
kãñĩnã wë
aaajöö...
À sölönũla wë
ditsö̀ té wi cha
kã́ñĩnã wë
aaajöö...
Se' kále bëlë à
kã́ñĩnẽ
Kále s tëlë à
kã́ñĩnẽ
Bökölè kiàle à
kẽ́ñĩnẽ
À sölönũla wë
ditsö̀ té rà wi cha
kã́ñĩnã wë
aaajöö…
À sölönũla wë
ditsö̀ té wi cha
kã́ñĩnã wë
aaajöö…
Kṍkõmõ cha kṍksala
kẽ́ñĩnẽ
Tölkamãla tölsala
kẽ́ñĩnẽ
Dimẽla cha shikölkamã
kẽ́ñĩnẽ
Dulmãla cha shikölkamã
kẽ́ñĩnẽ
Kõkõmã cha stëlkamã
kẽ́ñĩnẽ
À sölönũla wë
ditsö̀ té ra mi cho
kṍñĩnã wë
À sölönũla wë
ditsö̀ té ra mi cho
kã́ñĩnã wë
aaajöö...
Akiliba cha setuiga
kẽ́ñĩnẽ
Örsöà baratuika
kẽ́ñĩnẽ
Tkaalaka setuiga
kẽ́ñĩnẽ
Dìala bölötuika
kẽ́ñĩnẽ
À sölönũla wë
ditsö̀ té ra mi cho
kã́́ñĩnã wë
aaajööo…
À sölönũla wë
kṍñĩnãa wë
ditsö̀ té ra mi cho
Yëria cha la tuika
kẽ́ñĩnẽ
Kṍiröà làiröa
kẽ́ñĩnẽ
Yëiröa làiröa
kẽ́ñĩnẽ
À sölönũla wë
ditsö̀ lö rami cho
kã́ñĩnã wë
aaajöö…
À sölönũla wë
kṍñĩnã wë, kṍñĩnẽ wëe
Sàakökai cha biatuika
kẽ́ñĩnẽ
Sáksagài cha sa' la tuika
kẽ́ñĩnẽ
Se' àgö tsilituiga
kẽ́ñĩnẽ
Kulàkatalea lötuika
kẽ́ñĩnẽ
À sölönũla wë
ditsö̀ tö rami cho
kã́ñĩnã wë.
Traducción libre
El señor gritó: Ööö...
Oigan, familias,
amaneció, amaneció
aaajöö...
Oigan, familias,
yo digo que
amaneció, amaneció
aaajöö...
Para algún peligro, o mala noticia
amaneció,
para hacer cosas amaneció
Para pelear donde sea
amaneció
Oigan, familias,
palabras para las semillas
amaneció
aaajöö...
Oigan familias,
palabras para las semillas,
amaneció
aaajöö...
Para una persona bromista
amaneció.
Para bromear y conquistar
amaneció
Para bromas amorosas
amaneció
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció
aaajöö...
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció
aaajöö...
Para malos awápa
amaneció
Para el gusano töl
amaneció
Para las aguas malas
amaneció
Para el awá malo
amaneció
Un awá malo, muy malo
amaneció
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció
aaajöö…
Para trabajar, en el monte
amaneció
Para sembrar cosas
amaneció
Para hacer negocios
amaneció
Para comprar animales
amaneció
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció
aaajöö...
Oigan familias,
amaneció,
palabras para las semillas
Para grandes cazadores
amaneció
Para viajeros
amaneció
Para los conocedores del mar
amaneció
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció
aaajöö...
Oigan familias,
amaneció, amaneció
Para hacer ceremonias sagradas
amaneció
Para ser enterrador y cantor,
amaneció
Para ser gran awá
amaneció
Para poner asiento en las noches
amaneció
Oigan familias,
palabras para las semillas
amaneció.
Consideraciones para entender el canto "Amaneció"
(Cuando Sibö̀ iluminó el mundo)
Alí García Segura
Muchos pueblos creen que el ser humano es único, que no depende de nada ni de nadie. No se preguntan si las cosas que nos rodean en este mundo también son parte de la vida de los humanos. Se limitan a creer que los seres humanos son los indicados para definir la vida de todas esas cosas que nos rodean, como las plantas, el agua, los animales.
Desde la perspectiva de la cultura bribri, nuestros abuelos y padres nos enseñan para qué Sibö̀ hizo este mundo, cuál es el fin de la vida y cómo debemos compartirla con las cosas que conviven con nosotros. Entonces, cada vez que los padres comienzan a enseñarles los valores de la vida a sus niños, uno de las aspectos con los que empiezan las charlas es interpretando las cosas que Sibö̀ dijo cuando iluminó el mundo allá en Suláyöm, el centro del mundo para los bribris.
Se les recrea un escenario general de las cosas que existían en ese momento y los seres que colaboraron con el señor Sibö̀ para realizar la ceremonia de inauguración de este mundo. Este escenario les permite a los estudiantes o niños tener un panorama de las funciones que cumplen las cosas y los seres que habitan esta tierra.
Cuando se inicia el estudio, se explica a los niños que este canto lo hizo Sibö̀ cuando decidió inaugurar el mundo, en donde daría sus últimas palabras a los seres que colaboraron con él, incluyendo los humanos. Es aquí donde el narrador inicia indicando que Sibö̀ apresura a sus ayudantes, como el ser de la pava negra, para que reparta los últimos guacales de cacao para los visitantes, ya que está por amanecer. Este acto había sido maquinado por Sibö̀: él planeó que el ser de la pava negra, que es torpe de pies, tropezara con el tronco del fogón e hiciera que la olla de cacao se volcara, con lo que la pava negra se quemó los pies y los visitantes salieron huyendo. Esto hizo que algunos seres no tuvieran tiempo de pedir su recompensa, y por otro lado, tampoco le dio tiempo a Sibö̀ de purificar a algunos seres que él quería dejar como alimento a las semillas (los humanos).
Sibö̀ aprovechó el momento para llamar la atención de los presentes y les dijo: "Oigan, mis visitantes, ha amanecido, amaneció. ¡Qué bien!"
En un escenario como el que señalamos anteriormente, se puede ver al mismo Sibö̀ actuando como humano, es decir, utilizando a los ayudantes para su propósito, pero también exponiendo al ser humano como alimento para los otros seres. Esto es palpable cuando hace que su ayudantes salgan rápidamente para que no se quemen.
En este escenario se les enseña a los niños que no solo ellos existen y que el ser humano no es único, sino que somos parte de muchas vidas que estuvieron y están en esta tierra. Es en este mundo donde uno debe procurar el respeto igual a todos, sin tomar en cuenta la diferencia en los tipos de vidas.
El valor más importante de la cosmovisión bribri es conocer las causas de las cosas que le puede pasar a una persona, ya que estamos ligados con seres que no vemos pero que existen. Por ello, muchas cosas que les pasa a los humanos podrían ser la manifestación de un desequilibro entre el humano y los espíritus de las cosas. A menudo los médicos indígenas determinan que un humano que hizo alguna cosa mala solo fue vehículo de manifestación de los espíritus, aunque al final de cuentas siempre la persona termina siendo aislada por el pueblo.
De esta manera el pueblo bribri se explica la existencia de las cosas buenas y malas, las cuales se expresan en el ser humano. Los seres pueden hacer cosas buenas pero también tienen posibilidad de hacer cosas muy malas. Es algo que fue definido desde el principio del tiempo cuando todas las cosas eran humanas, todos los seres eran iguales.
Regresando al llamado de Sibö̀ en la inauguración del mundo, él dice: "Amaneció, amaneció, oigan mis visitantes amaneció, amaneció; para sembrar, para cazar, amaneció para hacer bromas, para conquistar mujeres, amaneció, para los awápa, tanto los buenos como los malos.
Así Sibö̀ nos indicó para qué él ha creado este mundo, al cual también le decimos "la casa de Sibö̀". En el canto él nos dice que el mundo es un lugar donde puedes encontrar cosas buenas, como cosas malas, puedes vivir con salud, o con enfermedades, puedes tener familias, y puedes cazar para ellos. Puedes ser una persona muy bromista o puedes ser muy bueno y sabio, o solo charlatán. Pero para todos hay un espacio en este mundo; nadie tiene por qué sentirse desafortunado, porque he iluminado para todos por igual, nadie tiene más de lo necesario para su vida en este mundo, eso dijo Sibö̀.
Por otro lado Sibö̀ nos indicó que en este mundo se puede hacer negocios, pero no aprovechándose de los demás. Los negocios son más que todo intercambios de los productos; el intercambio es una forma de hacer que todas las familias tengan lo que necesitan, de manera que cuando alguien tiene algo que uno quiere, uno puede obtenerlo con solo ofrecerle otra cosa que uno tenga.
En el mundo bribri, cuando uno recibe una visita se le debe ofrecer asiento. En una casa donde no te dieron ni un poco de agua, pero los dueños del hogar te ofrecieron un asiento, eso se interpreta como amistad ofrecida por parte del hogar visitado. Por ello en el canto se menciona que amaneció también "para poner asiento en las noches".
La cultura bribri educa haciendo visualizar acciones, actitudes o sucesos como cosas que tienen su verdadero origen en el mundo del más allá. Esto no significa que los bribris dejan que las cosas sucedan sin tomar medida, sobre todo cuando algunas acciones puedan dañar la tranquilidad de la población. El principio del tratamiento de los males es comunal; se cree que cuando se cura los males desde su origen se pone a salvo a toda la población.
Retomando las cosas que Sibö̀ nos dejo, podemos hablar de las bebidas. Para el pueblo bribri el brindar con chicha, bebida hecha de puro maíz, en las ceremonias, es lo más formal y correcto. Es la bebida de Sibö̀; él mismo la hizo como algo sagrado cuando aún era niño. Él le pidió a su madre que le diera un poco de maza de maíz fermentado; una vez que la comió le dijo a su madre: "Madre, lo que me diste es una bebida que le dejaré a las semillas, ya que es algo que quita la sed y el hambre, con eso ellos se alimentarán."
Nosotros los bribris creemos que Sibö̀ es exactamente como una persona normal; él siente hambre, le gusta bromear, tiene esposa, toma chicha, le gusta la fiesta, se equivoca, falla en sus cosas, hace trampa, en fin, es humano; por eso nada sucede por pura casualidad, todo pasa por que así fue establecido por Sibö̀.
Cuando uno sabe que cada cosa que se hace le está marcando el camino, uno tiene más cuidado en lo que va a hacer, y esto conlleva a ver las cosas que nos rodean no con mirada de destrucción, sino con el deseo de que las cosas permanezcan ahí para que la vida pueda continuar según el orden dejado por Sibö̀.
Cuando se estudia el concepto del mundo que tienen los pueblos indígenas, es fácil perder de vista el hilo conductor de este orden. Para estos pueblos, esa estructura que otra cultura podría ver como desorden, es el orden: todo está unido.
Así es como vemos el mundo, es como percibimos las cosas existentes en la tierra, utilizando la expresión tradicional, en esta casa de Sibö̀. Para hacer muchas cosas amaneció; así para nosotros amaneció, ya amaneció.